No tiene la crispación de “Calles peligrosas”, ni es la biografía exaltada de “uno de los nuestros”, los “Buenos muchachos”. Tampoco recorre el género para construir un personaje arquetípico y seductor, como Tony Camonte o Vito Corleone; ni se desgarra en la melancolía como lo hizo Leone en “Érase una vez en América”. “El […]