En poco más de cuarenta minutos, Desde el sonido (2011), de la destacada sonidista y diseñadora de sonido Rosa María Oliart, traza una cartografía acústica del Perú. Adoptando las técnicas del documental de observación, en una línea transitada con mayor radicalismo por James Benning, Oliart recorre el país construyendo un archivo de sonidos naturales y culturales. Las imágenes del fotógrafo Miguel Piedra dan cuenta de las atmósferas y espacios físicos que generan tales sonidos. La edición de Julio Wissar las une con nitidez.
Pero no se trata únicamente de un frío catálogo sonoro. El documental, acaso sin proponérselo, asume una forma reflexiva. Incorpora el registro de la película haciéndose y de las materias generando cada uno de sus sonidos ante los equipos de grabación. Asistimos al registro de las huellas acústicas ahí donde se producen, sea en un lago andino, al borde del Amazonas o en un mercado poblado de marchantes. Lugares donde la sonidista asume el papel de curiosa exploradora, de aire acaso aventurero, pero también de acuciosa científica, tan concentrada como cualquier taxonomista, distinguiendo y clasificando cada variación en el soplido del viento.
Oliart performa: se representa a sí misma, se muestra en su medio, luce su oficio.
Ricardo Bedoya