Melcochita amordazado. Mejor, Melcochita encorsetado, con camisa de fuerza.
“Gemelos sin cura” sigue la ruta contraindicada. Ata al comediante con los hilvanes de una trama indigente y desaprovecha, uno tras otro, los momentos que podrían haber dado pie a las desaforadas improvisaciones verbales de Pablo Villanueva.
Cualquier posibilidad de humor –por más chabacano que sea- se arruina con el corte y la pega a la allá va (es difícil decir que estamos ante un trabajo fílmico de montaje o de edición) de situaciones que se quedan a media caña, desinfladas, con el chiste a medio hacer, como la secuencia del exorcismo o de la misa con son. Como comedia, es inexistente; como película, bastante menos que eso.
Ricardo Bedoya
No he visto pero he de suponer que trata de repetir el plato de “Asu Mare”.
Pasará de cinta a ser un buen chiste, y si se planea llevar al extranjero(como menciona su director) no se vea como representativo de TODA nuestra sociedad.
Ayer la vi a insistencia de mi novia que tenia curiosidad de verla. Me dejo sorprendido el hecho de que gran parte esta fuera de foco, y no era el proyector. Se nota que han querido utilizar un exagerado bokeh con la idea amateur de a menor profundidad de campo mas “look cinematofrafico”. Lo que me soprende es el poco control de calidad que tienen las empresas de salas de proyeccion. En otras palabras, cualquiera que tenga el dinero para alquilar las salas puede proyectar su “pelicula”. Lamentable.