Este comentario de Lusers fue publicado en la edición 2046 de la revista Caretas.

El mejor chiste de Lusers lo oímos en el tráiler (“¡hay que tener cuidado con este tipo!…”). En la película quedan las sugerencias del departamento de marketing: luego de los éxitos de ¡Asu mare!, apuntar a un mercado ampliado (chileno y argentino); jugar a una fórmula probada como la comedia de “compinches” en peligro, y unir a tres figuras de raigambre televisiva de cada uno de los países involucrados, como Alcántara, Izquierdo y Granados.

Lo demás está escrito sobre piedra desde hace décadas. La trama se mueve entre el disparate y el absurdo en escenarios “exóticos”, de preferencia amazónicos. La producción solvente, de look estándar, asegura su difusión en otros países. La química entre los protagonistas resulta indispensable. Reciben tiempos equivalentes de exposición en la pantalla para que luzcan sus “números” individuales (Izquierdo bailando como Travolta) o para la performance colectiva: los tres entonan una canción de Eros Ramazzotti, único momento con gracia de la película. Sigue aquí.

Ricardo Bedoya